Desde hace un año vivimos cambios que nos obligan a reflexionar y redefinir las formas de relacionarnos laboralmente. Extensión del teletrabajo y readecuación de los espacios de trabajo.
Para las empresas la salud del equipo de trabajo debe ser una prioridad, por lo que hay que buscar un equilibrio entre diseño, funcionalidad y bienestar de trabajadores y trabajadoras.
Por eso, hoy las empresas se centran en crear espacios de trabajo acogedores, seguros, ergonómicos y que además faciliten un mayor desarrollo profesional.
¿Qué se debe buscar?
- Búsqueda del equilibrio entre privacidad y espacio abierto.
Las nuevas tendencias pre-covid apuntaban a espacios abiertos que fomentan las sinergias entre el equipo, pero ahora deben replantearse hacia la búsqueda de áreas más privadas que faciliten las distancias de seguridad y a su vez que ayuden a la potenciación de otros formatos de comunicación como video-llamadas.
- Ambientes naturales, luminosos, acogedores y sostenibles.
La conciencia medioambiental ya no es una moda, sino que se ha convertido en una filosofía y una forma de entender la vida que afecta a todos los campos de nuestra existencia. Los espacios de trabajo deben integrar elementos naturales y sostenibles tanto en el mobiliario con materiales nobles y reciclables, como en el funcionamiento de las empresas.
- Fusión del hogar y la oficina.
La clave es unir los beneficios que nos aporta trabajar en la oficina como puede ser la ergonomía, la conexión y la productividad con el confort, la calidez y el poder disponer de varias zonas que tenemos en el hogar.
El lugar de trabajo y el hogar se funden irremediablemente y la utilización de los colores neutros, la incorporación de materiales nobles, reciclables y sostenibles, son soluciones que cada vez están más presentes en el diseño y la personalidad del hogar y la oficina.